La familia heredera de Carrefour pone su ojo en DIA en plena ampliación de capital
Los Bontoux Halley han sido contactados para jugar un papel relevante en el futuro del grupo de supermercados, mientras Luis Amaral ya ha tomado un 3% con socios
14/01/2019 05:02
El consejo de administración de
Distribuidora Internacional de Alimentación (DIA) última con
PwC el plan de negocios que respalde el acuerdo alcanzado con la banca para refinanciar la deuda a corto plazo, con el que intentará convencer a los inversores para que acudan a la
ampliación de capital de al menos 600 millones de euros. A la espera de la aprobación legal de esta operación de rescate, varios inversores internacionales han mostrado su interés por participar en la recapitalización. Entre otros,
Luis Amaral y la familia Bountoux Halley, herederos de Carrefour.
Según han confirmado fuentes financieras, Amaral, dueño de
Eurocash Group, la primera cadena de supermercados de Polonia, tiene ya un 1% de DIA. Un paquete de acciones que ha adquirido en consorcio con otros empresarios españoles
hasta alcanzar un 3% del capital. Estos inversores se han puesto en contacto con el consejo de administración de la compañía dirigida ahora por
Borja de la Cierva para mostrarle su apoyo en la nueva etapa y exigirle que tome medidas disciplinarias y legales contra los que hasta finales de año eran los representantes de
LetterOne en el órgano de gobierno del grupo.
LetterOne, el vehículo de inversión del millonario ruso Mikhail Fridman, es dueño del 29% de DIA y llegó a tener hasta tres miembros en el consejo
LetterOne, el vehículo de inversión del millonario ruso Mikhail Fridman, es dueño del 29% de DIA y llegó a tener hasta tres miembros en el consejo hasta el pasado 18 de diciembre, cuando dimitieron los dos últimos,
Karl-Heinz Holland y Sergio Antonio Ferrera Dias.
Antes había abandonado la compañía
Stephan DuCharme, el hombre de confianza de Fridman, con la justificación de que, al no estar de acuerdo con las decisiones de la compañía sobre la recapitalización, quería tener las manos libres para adoptar las medidas oportunas en interés del fondo de inversión.
Ahora, tras la aprobación el pasado 31 de diciembre de
la refinanciación provisional de la deuda, condicionada a la ejecución de una ampliación de capital de al menos 600 millones, el consejo de DIA y los bancos acreedores están pendientes de los movimientos de Fridman, que ya no podrá lanzar una oferta pública de adquisición (opa) por la totalidad de la compañía hasta octubre a un precio similar al de mercado. Sin embargo, su voto en la próxima junta extraordinaria para validar la ampliación es vital en el caso de que opte por rechazarla.
Ante esta incertidumbre, según aseguran fuentes próximas a las conversaciones, otros inversores han aparecido en el tablero. Uno de los inversores con quien han contactado las partes es la familia Bontoux Halley, los herederos de Carrefour y
dueños del 13% del capital de la gran cadena francesa de supermercados. Los Halley eran los antiguos propietarios de
Promodès, que después se fusionó con el grupo resultante de la unión de Continente y Pryca y que dio lugar al actual gigante de la distribución en Europa. Robert Halley es presidente de honor de la compañía, de la que fue primer ejecutivo hasta 2008.
¿Con Fridman?
Puestos en contacto con un miembro directo de la familia, ha declinado hacer ningún comentario sobre su presunto interés en jugar algún papel en la batalla por DIA. “No quiero hablar de ese tema”, ha respondido un portavoz de los Halley. Fuentes próximas al consejo del grupo español de supermercados desconocen las potenciales intenciones de los Halley, por lo que se deduce que, en caso de entrar en la batalla,
no están del lado del nuevo equipo gestor encabezado por De la Cierva.
Otras fuentes matizan que ello no quiere decir que estén con LetterOne, sino que los herederos de Carrefour consideran que la actual situación de DIA es una gran oportunidad de entrar en un negocio que conocen al dedillo, por haber estado en la cocina del mayor grupo de distribución de Europa y uno de los mayores del mundo. Pero, de estarlo, sería el socio ideal del magnate ruso, ya que le podría ayudar a tomar el control de DIA al oponerse conjuntamente a la ampliación o presentando un plan alternativo de recapitalización.
Ferreira Dias, uno de los dos consejeros dimitidos en diciembre, trabajó en Carrefour en la etapa en que la familia francesa gestionó la multinacional
No obstante, los Halley y LetterOne tienen
una vinculación. Sergio Antonio Ferreira Dias, uno de los dos consejeros que dimitieron a finales de diciembre, trabajó durante muchos años en Carrefour en la etapa en que la familia francesa gestionó la multinacional.
DIA vale actualmente en bolsa 256 millones de euros, por lo que es presuntamente un caramelo para inversores externos que puedan lanzar una opa sobre la totalidad del accionariado, dada su alta generación de caja. De hecho, la empresa espera mantener un beneficio bruto de explotación o ebitda cercano a los 250 millones, todo un seguro para los acreedores y potenciales compradores que, además, estén dispuestos a hacer una aportación adicional de recursos propios. La cotización, que subió tras el anuncio del acuerdo provisional con la banca, ha vuelto a caer con fuerza durante la primera semana del año.
https://www.elconfidencial.com/empresas/2019-01-14/la-familia-heredera-de-carrefour-pone-su-ojo-en-dia-en-plena-ampliacion-de-capital_1753730/