Los analistos que cobran sueldazos en la banca de inversión y también los youtubers analistos bien reputados frecuentemente sirven sólo para despistar a los particulares. Os cuento lo que me ha pasado, si es que a alguien le interesa mi error. Después que el oro spot tocase los 3704 $/onza y comenzase a hacer una ligera corrección, UBS dijo que retrocedería hasta la zona de los 3600 y se quedaría ahí una temporada lateral. Cárpatos dijo que como el precio había rozado la banda superior de Mogalef en gráfico 1D, cerraba su posición en oro y que iba a esperar a que cayese bastante antes de reentrar. Yo iba largo, con un 25 % de mi cartera en un ETF de oro, muchos beneficios potenciales y, sobre todo, muy tranquilo y muy feliz... pero me dejé influir y vendí todo poco después del máximo consolidando unos buenos beneficios pero traicionando mis intenciones de ir a plazo mucho más largo. Pues bien, NO HA CAÍDO TANTO como los analistos dijeron y cuando vi que volvía a subir, recompré rápidamente la mitad de mi posición anterior, aunque algo más barata. La otra mitad no, por si seguía bajando, por si los analistos eran más listos que yo. Sucedió al revés. Ha pegado un subidón y se me escapó en precio. Ahora me encuentro con un 12.5 % de mi cartera en oro pero el otro 12.5 % que debería tener ¿cómo voy a aceptar pagarlo a 3747 el lunes o mañana martes si el pasado jueves me negué a pagarlo a 3640? ¿Cómo me voy a tragar ese sapo aunque esté convencido de que el objetivo del triángulo alcista que dibujó en verano y que ha roto sea 3850?
Pero es que es la situación es aún peor: Hacienda me va a crujir un 21 % de los beneficios que he aflorado.
A veces nos equivocamos por tener exceso de información, que suele ser de mala calidad aunque pensemos que viene del Olimpo. El mejor análisis es el que uno mismo hace con su propio criterio y no hay que dejarse influir por lo que digan otros.