Hola Jemar,
espero que no te importe mucho si digo yo algo al respecto de tu comentario.
Ganar 'más' con los dividendos es un verdadero arte. Para construir una cartera que funcione de verdad por los dividendos, hay que hacer inversiones con muchísima información y con muchísima cabeza, algo que no suele estar al alcance de todos y muy en especial, de la mayoría de los inversores.
Hoy en día, lo que prima es la inmediatez. Hay que ganar algo razonable, pongamos un 10%, en poco tiempo. Se elige el subyacente según el gráfico, se espera un tiempo razonablemente 'corto' a que alcance alguna cotización que pueda hacer de soporte y se entra con la esperanza de salir en pocos días o de ejecutar un stop-loss de un 2% o 3% como máximo.
Los 'inversores' con más aplomo, quizá evalúen la posición cuando ha alcanzado la rentabilidad objetivo para saber si se puede estirar más. Aunque dudo que muchos lo hagan, alcanzado el objetivo se liquida y se asegura el beneficio.
Quizá por este enfoque inmediato desde hace tiempo se usan más los derivados: la inversión que se realiza usualmente es limitada y los rendimientos están apalancados y en varios casos, las pérdidas limitadas (como en los CFDs, por ejemplo).
Si se quiere una inversión que genere dividendos, todo esto cambia. Es mejor comprar las acciones directamente, y si puede ser, mantenerlas en algún depositario que cobre pocas o ninguna comisión. Y mantener la inversión, para cobrar los dividendos, que pueden ser entre una y pongamos 12 veces al año.
Para que una inversión de este estilo funcione, las empresas seleccionadas deben generar dividendo y además, deben repartir una parte de los beneficios y no una parte las reservas (por ejemplo). Conviene que sean empresas muy sólidas, con unos ingresos recurrentes y predecibles, a poder ser, que se incrementen año tras año, con unos gastos que crezcan en línea con los ingresos (o menos). Claro, esto exige hacer más un análisis fundamental que uno técnico. Este tipo de empresas deben tener unos fundamentales sólidos, un buen negocio, deben ser rentables y con unos ingresos que se puedan estimar y no dependan mucho del ciclo económico. Por ejemplo.
Mejor aún si se eligen empresas que tienen lo que denominan 'foso defensivo': básicamente que sea un negocio regulado (por ejemplo, eléctricas, nucleares, gasistas, telecos, farmas); o que requieran una gran inversión para poder poner en marcha el negocio (por ejemplo: las que hacen chips, nucleares, farmas), o empresas que dependan de una patente, diseño o fórmula única que impida copiar el producto (ejemplo típico: Coca-Cola).
Y, y esto es muy importante, comprar en un buen momento. De alguna forma, hay que optimizar el rendimiento del capital y hay que esperar y comprar en un buen momento. Lo mejor, después de que se haya producido una buena caída. Muchas caídas del mercado son 'histéricas' y se producen en todo el mercado sin importar mucho si tiene sentido o no. Sencillamente primero se cae 'por si acaso' y después ya se verá qué empresas merecen la corrección y cuáles pueden recuperar su valor o casi.
Claro, esperar, con los dineros parados en una cuenta o invertidos solo en deuda a muy corto plazo, durante igual, 8 o 10 años, a que se produzca una gran caída que baje la cotización hasta un punto en el que sea interesante para poder cobrar unos buenos dividendos aunque la acción no suba, exige una gran disciplina y mucho aplomo.
Habría que preguntarse ¿he comprado Telefónica en el 2020 cuando hizo mínimo en 2.43€ y un dividendo de 0.30€? Es más de un 10% de rendimiento. En 10 años se ha 'amortizado' la inversión. Es cierto que no es una acción de las que habría que elegir por el crecimiento de sus beneficios, pero da un buen dividendo, ha estado a muy buen precio, es una empresa de un sector defensivo, de un buen tamaño y en la que se puede hacer incluso una inversión grande (por el número de acciones en circulación y su capitalización, digo). También se podrían haber comprado bancos como el SAN en 1.58€ o como el BBVA en 2.10€. O incluso Inditex en 18.54€, que no da un gran dividendo, pero parece un dividendo muy seguro, parece una empresa muy sólida, con beneficios crecientes, y dividendos crecientes. Visto con perspectiva, hubiesen sido entradas claras para recibir o acumular dividendos durante muchos años. ¿Se hicieron esas compras? Si es que no, ¿por qué no?
Buffett, que de esto de hacer inversiones para recibir dividendos sabe bastante, se ha quejado varias veces de no haber comprado más 'Coca-Colas', una de sus compras más antiguas (empezó a comprarlas en 1988) y que ahora le reporta un rendimiento en dividendos similar a la inversión inicial que hizo en las acciones en su momento (dicen que fueron unos 1000 millones de $). Berkshire tiene ahora unos 400 millones de acciones de Coca-Cola, que son el 10.9% de su cartera y más del 9% de las acciones de Coca-Cola y que producen unos 816 millones de $ en dividendos a Berkshire cada año.
¿Y cuándo empezó a comprar Berkshire las acciones de Coca-Cola? En 1988, después del desplome de 1987 ... después de una buena caída.
Y aquí es donde hay que preguntarse ¿soy un inversor paciente, que puede tener el dinero en un fondo monetario, esperando años a que se produzca una caída de un -45% como la que ocurrió en 1987 en Coca-Cola para comprar o soy un inversor que tiene que estar invertido rentabilizando su capital, mucho o poco, mientras el mercado sube? Porque si la respuesta es la segunda, será difícil aprovechar las oportunidades como las que se dieron en 1987 o en el 2000 o en el 2020, en especial si estás atrapado en la caída por estar invertido en vez de esperando con tu dinero aparcado.