Re: Reducción de la jornada laboral para repartir el empleo - crisis
Me gusta la idea,menos horas de trabajo y mas tiempo para otros menesteres.
Me gusta la idea,menos horas de trabajo y mas tiempo para otros menesteres.
«el mercado es tan imperfecto que un incremento de la productividad no se traduce en una bajada de precios, sino en un incremento de márgenes».
Eso es cierto, Antoine... durante unos meses, o un par de años como mucho. Al final, lo que ocurre es que si el aumento de productividad que yo tengo en mi empresa lo aprovecho para aumentar mis márgenes, entones será otro competidor que esté dispuesto a ganar menos margen que yo el que utilice esa tecnología que aumentó la productividad para producir lo mismo que yo y venderlo un precio menor, y luego serán más competidores los que estarán dispuestos a ganar menos, y otros competidores nuevos que aparecerán de debajo de las piedras. Y finalmente, yo mismo me tendré que bajar del burro. Ahora, que durante un par de años me he "aprovechado" (LEGÍTIMAMENTE) de ser el único que ha podido disfrutar de los beneficios de una innovación.. sí, de acuerdo... pero al cabo de dos años, al final la tecnología es de dominio público, y si yo soy un usurero, ya saldrán competidores dispuestos a ganar menos que yo. Es lo que ha ocurrido siempre, ¿no? Dime un avance de hace 40 ó 50 años que haya sido monopolizado por un empresario y que hasta ahora nadie haya sabido mejorarlo.
Yo creo que estás confundido. ¿Por qué al cabo de dos años y no de 10, de 20 ó de 30?
Hay montones de ejemplos de productos que han disfrutado y disfrutan del monopolio de la ventaja competitiva de su innovación durante emucho tiempo. Uno de los más paradigmáticos es el Valkman de Sony: 30 años (de 1979 a 2010).
http://tecnologia.elpais.com/tecnologia/2010/10/24/actualidad/1287910861_850215.html
Este es uno de los muchos ejemplos que existen de que cuando la empresa líder (la poseedora legal de la innovación) hace las cosas bien y simplemente defiende su innovación patentándola y estando atenta para defenderla de los intentos de copias ilegítimas de sus perseguidores, no tiene porqué bajarse de ningún burro ni “aprovecharse” de nada.
Saludos
esa imperfección a la que me refiero es mucho mayor que la que tú señalas. basta que observes como en todos los sectores, en todos, se están produciendo continuamente grandes procesos de concentración, oligopolistas, que luego acuerdan y pactan no agresividades entre ellos para ser agresivos con la sociedad.
Detesto a las víctimas que respetan a sus verdugos.
Bueno, a ver... 2 años es un decir, lo que quiero decir es que un avance tecnológico, a corto plazo, beneficia únicamente a quien ha inventado y desarrollado ese avance. A medio plazo, a los pocos que lo comercializan, que aumentan sus márgenes de beneficio sin reducir el precio de venta al público. Y al final, a largo plazo, termina beneficiando al consumidor.
Que sí, que vale, que hay muchas patentes y monopolios y tal y cual... Mi MP3 me lo compré hace 5 años por 50 €, ahora los habrá más baratos siendo mejores. Mi TDT grabadora me costó también 50 €, una TDT que me graba en un pendrive, y que lo borro y grabo tropecientasmil veces a una calidad excelente... Si eso existiera hace 20 años, ponle precio. Cualquier videograbador que te costase en aquella época 300.000 pesetas, era una puñetera basura al lado de mi TDT grabadora (le voy a poner nombre de mujer a mi TDT grabadora...). Y como esto, pasa con todo lo mismo. Mira también los robots de cocina, cuando empezaron, lo que costaban, y lo que cuestan hoy día siendo mejores que los de hace años. Y los televisores... antiguamente sólo la gente rica tenía televisor en casa, y una puñetera basura de televisor...
Ya te digo que, a largo plazo, la mejora en la productividad termina favoreciendo al consumidor. Y ello, a pesar de las patentes.
el problemas es, al menos en españa, que cada vez quedan menos consumidores: unos por que se van de españa (creo que la población ya ha bajado mas de 1 millón de habitantes) y otros por ser expulsados del mercado laboral (otros 6 millones menos de consumidores); y el resto ha visto tal rebaja de salarios que se limita al consumo de subsistencia (patatas, lentejas, arroz, y los domingos algo de pollo).
los avances tecnológicos han beneficiado a la sociedad solo cuando han existido leyes protectoras del trabajo, así es como se ha pasado de las 14/16h. de trabajo/día del inicio del capitalismo a las 8h/día actuales. el paro surge entonces cuando dejas de reducir la jornada de trabajo para solo incrementar el margen del capital, que es lo que lleva ya unos años sucediendo.
ya ves como la mejora de la productividad per se no mejora nada sino todo lo contrario.
Detesto a las víctimas que respetan a sus verdugos.
TODO SE TORCIÓ EN LOS 80
De media, los ciudadanos de los países ricos viven cuatro o cinco veces mejor que en 1930, pero sus horas de trabajo sólo se han reducido un quinto. Y el límite de sus deseos ha desaparecido. Según el libro, el gran progreso en las condiciones de vida que siguió a la II Guerra Mundial se torció en los años 80, cuando Ronald Reagan y Margarte Tatcher pusieron el crecimiento de la economía (un indicador que no tiene en cuenta otras preocupaciones del ciudadano como el ocio o el medio ambiente) como fin en sí mismo del Estado y no como un medio para permitir la buena vida de sus ciudadanos. Fue entonces cuando se puso la semilla de la crisis financiera actual. En paralelo, se retrocedió en campos en los que el progreso parecía indiscutible.
Las desigualdades entre una élite que amasa monstruosas sumas de dinero y el resto de la sociedad se convirtieron en un abismo. Las sociedades tienden a dividirse entre los que trabajan mucho y no logran satisfacción de su dinero y los pobres, cada vez más numerosos en los últimos años. En los 80, el pleno empleo dejó de ser una fin de la economía, la esperanza de vida aumentó, pero no fundamentalmente por el crecimiento, como antes (sino por la aplicación de la tecnología, y lo hizo también en países pobres), los derechos laborales comenzaron a debilitarse y la labor social del Estado con los más desfavorecidos, a través de las prestaciones sociales, comenzó a ser vista como una forma de parasitismo. Son los efectos secundarios de un crecimiento al servicio del crecimiento.
http://www.huffingtonpost.es/2012/10/26/robert-y-edward-skidelsky_n_2021165.html
Detesto a las víctimas que respetan a sus verdugos.
¿Y bien? Nadie se da cuenta, ¿verdad? ¿Nadie se da cuenta de que ésta es la solución contra el paro?
* «Lo que hay que hacer es fomentar la contratación, con medidas atractivas para el empresario». Yo soy pequeño empresario (vamos, un pequeño negocio familiar, una PYME), y el problema que tenemos no son las condiciones de contratación, el problema que tenemos es la falta de consumo. A la gente la están empobreciendo y metiendo el miedo en el cuerpo, y así es como se está estancando el consumo: entre los que no compran porque no pueden, y los que pueden pero no quieren porque tienen miedo, la gente no gasta nada... y es normal, yo tampoco lo gastaría si estuviera rebosando de dinero. Yo estaría encantado de contratar a alguien multiplicando su sueldo por 2, si a cambio el consumo en mi tienda se multiplicase por 7, dejémonos de chorradas. Lo que me preocupa realmente no son las condiciones de contratación, lo que me más me preocupa son los beneficios de la empresa, y esa vuelta al franquismo en las relaciones laborales nos está llevando a las pequeñas empresas a arruinarnos porque no vendemos nada (claro... a los trabajadores por cuenta ajena, que son la mayoría de los clientes, se les empobrece... pues no vienen a comprar).
* «Lo que hay que hacer es tomar medidas que reactiven y fomenten el consumo». Vamos a ver, de lo que se trata no es de crearle al consumidor un problema que no tenía y ofrecerle la solución comprando un cacharro que no sirve para nada. De lo que se trata es de que todo el mundo pueda trabajar y consumir, y ya entonces serán los consumidores, ellos solitos, los que decidan en primer lugar lo que se gastan en satisfacer sus necesidades y luego, una vez satisfechas las necesidades, el consumidor decide también lo que se gasta en caprichos (que no sólo de pan vive el hombre), y lo que ahorra por si pudiera haber algún "imprevisto". Para eso ya somos mayorcitos.
* «A un tío que tiene una hipoteca y unos gastos fijos todos los meses, no le puedes venir ahora con que tiene que trabajar menos y cobrar menos». De acuerdo... A un tío que tiene una hipoteca y gastos fijos todos los meses, no le puedes venir ahora con que le vas a quitar una paga extra, o con que le vas a subir los impuestos, o con que le vas a quitar la ayuda a la dependencia, o con que le vas a subir el IVA en los libros de texto, o con que le vas a reducir la indemnización si le despiden, o que... Todo esto se ha hecho, sin preguntar a la gente si tenía hipotecas, ¿verdad? Y nos hemos tenido que joder... Es más, si hace 5 años se hubiese hecho esto (lo de la reducción de la jornada), seguro que no habría habido los 500.000 desahucios que ha habido. Sin embargo, si hace 5 años se hubiese quitado la extra de Navidad a los funcionarios, subido los impuestos, el IVA, subido los precios de libros de texto, se hubiesen suprimido las ayudas a la dependencia, etc., no se habría conseguido evitar con eso ni un solo desahucio (es más... habría provocado más desahucios).
Vamos a ver si lo entendemos de una puñetera vez: que no somos los autónomos los que creamos puestos de trabajo, que lo que crea los puestos de trabajo es la demanda de los consumidores. Una vez que ya está contratada toda la gente que hace falta en las empresas para satisfacer la demanda de consumo, no puedes solucionar el problema del paro mandando a la mitad de los parados a abrir agujeros, y a la otra mitad para que los tapen, que de lo que se trata no es de trabajar por trabajar, sino de que el trabajo sea socialmente productivo (aunque tú lo hagas pensando en tu propio bienestar, legítimamente). Tampoco se trata de fomentar el consumo de artículos que la gente no demanda (porque si no los demanda, es porque no los necesita), se trata de dejar que cada uno consuma en función de la renta de que disponga y de lo que le pida el cuerpo.
Si el número máximo de horas semanales para conseguir el pleno empleo (o reducir el paro hasta el 5%) es, por poner un ejemplo, de 33 horas, tenemos que quitarnos de la cabeza el chip de que "no me da la gana de que me quiten 7 horas de mi trabajo y de mi sueldo para dárselas a otro, a qué fin"). No, lo que tenemos que entender es que esas 7 horas "sobrantes" que trabajamos, se las estamos quitando de su trabajo (y de su sueldo) a otras personas que están en el paro y que quieren trabajar pero no pueden. ¡OJO! Que no hablo de repartir la riqueza, ni de que todo el mundo cobre lo mismo, hablo de repartir el trabajo, de repartir las horas de trabajo para que todo el mundo pueda trabajar y trabaje, eso sí, cobrando más un ingeniero que un barrendero, claro, hasta ahí llegamos todos. Y el tiempo que te "sobra" después de que te hayan quitado esas 7 horas hipotéticas, lo dedicas si quieres a formarte para ser más competitivo, y así aspirar a que tu trabajo se cotice mejor y puedas ganar más de lo que ganas. Pero no debemos aspirar a ganar más quitándole el trabajo a otros, sino en todo caso formándonos para ser más competitivos y que nuestro trabajo por hora valga más.