Queequeg, has diseñado una cartera con una distribución 30%RF-70%RV, donde la parte correspondiente a renta fija se la asignas a un único fondo, flexible, de corte conservador, y la parte de renta variable la repartes en cuatro fondos, tres de ellos globales de corte defensivo con una baja beta (especialmente el BL y el Comgest World), y le añades otro flexible europeo, mucho más volátil.
El planteamiento de esta cartera debe estar orientado al objetivo fijado, que es disponer del capital para la compra de una vivienda en un plazo de 5-7 años. Siempre es conveniente situarse en el escenario más prudente, por lo que el plazo de recuperación lo podrías dejar en 5 años.
Con este objetivo, habría que valorar seriamente reducir tanta exposición a bolsa. Es un plazo muy pequeño para llevar un 70% de exposición a renta variable, por muy defensivos que sean los fondos seleccionados, donde la mayor carga está en staples y salud, seguido de tecnología. Lo principal es que, llegado el momento, la cartera haya sido capaz de preservar capital.
Sin embargo, comentas que sólo vas a destinar un 25% de tus ahorros a la inversión, por lo que el escenario cambia radicalmente. Ahora el 70% de la inversión en renta variable se reduce al 17,5%, un porcentaje mucho más razonable para alcanzar tu objetivo. Tu cartera no es como la expones, sino:
7,50 %Nordea Flexible Fixed Income(LU0915365364)
5,00% BL-Equities Dividend B Eur(LU0309191657)
5,00% Seilern World Growth Eur UH (IE00B2NXKW18)
5,00% Comgest Growth World Eur (IE00BD5HXK71)
2,50% Comgest Growth Europe Opportunities(IE00B4ZJ4188)
75,0% Liquidez
La foto cambia, ¿verdad?
Bajo el paraguas de la liquidez (75%), puedes asumir un poco más de riesgo. Valora quedarte con dos o tres buenos fondos globales, de calidad, pudiendo prescindir del BL (el colchón ya lo tienes con la liquidez). En la medida de lo posible, quizás sea conveniente evitar el riesgo divisa.