Lo único que hoy por hoy, quien paga las facturas de la administración catalana es un tal Sr. Montoro. Y me parece que el tal es del PP.
Cosas de la excelencia dels "millors", que no supieron hacer otra cosa que pedir el rescate (le pongan el eufemismo que le pongan).
Así que hacerle gracietas a ERC a cuenta del PP, pues sí, no sería complicado (Badalona, mesa del Parlament,...). Hasta que llegue el vencimiento de la siguiente remesa de facturas, que por ahora, y durante mucho tiempo (me temo), va a seguir pagando un ministro del PP.
Y pensar en ir a Torres Negras a pedir un crédito puente (hasta la independencia soberana), pues me parece que es algo así como imposible.
El escenario más verosimil (dentro de lo posible, no de los mundos ideados), es algo similar a lo que fue el último gobierno Pujol, en el que el actual fue conseller en cap. No pactos formales, pero si un doble pacto bajo la mesa, con PP y ERC, para que mediante las mutuas abstenciones, CIU haga y deshaga en el día a día. Y de tanto en tanto, les dará una alegría, ora a unos, ora a otros.
Al PP catalán (un partido aquí bastante minoritario) ya le significa mucho mantener una importante "influencia" en los asuntos de gobierno. Y a ERC el juego de la equidistancia de entonces les fue muy bien. Sacar el máximo rédito político con el mínimo desgaste.
Y claro, como no existirá ningún pacto escrito ni público, lo del referendum, pues ya se verá y decidirá en su momento.
Puro esencialismo catalán. Laputailaramoneta power.
la plus belle des ruses du Diable est de vous persuader qu'il n'existe pas!