Estimado Carlos,
Como sin duda conoces el problema no consiste en que gracias a la contratación de productos (planes de pensiones, tarjetas, nóminas, seguros, sartenes y cafeteras) puedas llegar a tener un cierto interés bonificado.
El problema consiste en que SIN dicha suerte de accesorios el interés que pretende cobrar el banco/caja está totalmente fuera de mercado y de lógica.
Lo cual acaba sugiriéndome que tal "bonificación" no es sino una forma de poner las cosas en su sitio partiendo de un interés agravado.
Los diferenciales "bonificados" no son notoriamente inferiores a los diferenciales existentes cuando esta práctica no se llevaba a término. El márgen para la entidad financiera es prácticamente el mismo de antaño solo que con su política salvaje de apertura de oficinas en cada manzana el negocio está sobrecargado de gastos fijos. Se estima que a la banca española le sobra alrededor del 40% de su parque de sucursales, lo cual no es precisamente una broma y menos aún inteligente mantenerlo. Pero replegarse parece ser una estrategia mal vista así que lo que hay que hacer es mantener esa estructura mastodóntica a base de exprimir al cliente hasta los orujos.
Además, y no me cansaré de repetirlo,el criterio de que "bueno, en algún lado tenía que hacer el seguro y qué más da que sea en el banco" es terriblemente inconsciente de la realidad del seguro. Aparte de que una enorme cantidad de asegurados en la banca española están en situación de sobreseguro en continente, de infraseguro en contenido (si lo hay) y con una paupérrima cobertura de responsabilidad civil en la mayoría de los casos que he tenido el deber de asistir, resulta que el seguro de hogar o el de vida no están tan commoditizados como se nos pretende hacer creer. Y de ahí que entre dos seguros de hogar de dos entidades distintas haya diferencias muy notables en cobertura lo que hace que el uno pueda ser la mejor solución para un asegurado y la peor para el otro. El café para todos que se sirve en esos lugares no es precisamente saludable para la economía de una familia o de una empresa si, llegado el momento del siniestro, la diferencia entre lo que será indemnizado y lo que debiera ser indemnizado se mide por decenas o centenares de miles de euros.
A esa realidad que se le escapa a nuestra Administración, hay que sumarle el detalle de que se esclaviza o somete al consumidor durante prácticamente el resto de su vida a una solución de seguro a la que no ha optado y no se moverá de ahí de puro pavor por los efectos que tendría sobre su economía familiar. Si eso está en línea con el RDL 1/2007 explícamelo porque yo no lo entiendo.
Por último si yo fuera accionista del banco XXX estaría bastante cabreado con el Consejo de Administración. Porque si a cambio de un 20% de un seguro de hogar de 200 € de prima neta (40 €) le bajan un 0,20% el diferencial eso le está haciendo un traje, abiertamente, al dividendo. Es decir, que a lo mejor esto habría que resolverlo por Sociedades... y por prácticas desleales del Consejo. Bromas aparte: no se sostiene que el banco/caja por 40€ de comisión deje de ganar en intereses 175,66€ por bonificar. A ese nivel de buenismo no ha llegado la banca tras tantos siglos de experiencia. Lo que ocurre es, como he comentado que si te hacen el seguro dejan de ganar 40 y te lo van a recordar cobrándote 175 más que es una forma muy diferente de ver el asunto.
Ves, con un fondo de pensiones el timo es más gordo por lo que ahí ya me encaja que sí bonifiquen. Con comisiones del 2,5% y del 0,5% sobre el valor total del patrimonio a lo largo de toda una vida sí se gana una pasta gansa con el cliente aunque pierda con la gestión desastrosa de su fondo. Si, además, es de renta variable ¡Yujuuuuu! porque cada compra-venta de valores genera comisiones para la agencia de valores del banco/caja y comisiones para la cuenta de custodia de valores y, además, admite perfectamente inversión en la cartera de empresas del grupo financiero o acudir a las colocaciones que nadie quiere sin problemas. Además, para más inri, permite realizar aplicaciones sobre valores concretos en los que un volumen importante de venta o de compra permite adquirir posiciones dominantes. Todo un ejercicio táctico que financia el pobre partícipe. Basta mirar el estado de los FPRV para ver por dónde van los tiros. Si yo fuera uno de los "especialistas" que gestionan algunos fondos ya habría pedido la baja por incompetente.
Me gustaría conocer tu opinión al respecto.
Un abrazo,