Perdón por los errores en la redacción del post anterior.Quería decir, que el “timo de la estampita” es consecuencia del engaño de un estafador (el gancho) y de la avaricia del estafado, que quiere conseguir gran beneficio sin esfuerzo y a costa de un tercero (el tontito). En este caso pierde el estafado y gana los estafadores.Es cierto que existen seguros de inversión de escasa rentabilidad, y que no sirven para el largo plazo, pero no podemos hablar de un timo, porque en ellos no gana nadie. Ni el inversor, ni el vendedor.Lo contratación de este tipo de productos suele ser consecuencia de un mal planteamiento por parte del inversor y un peor asesoramiento por quien se lo ofrece al inversor.Como os decía, este no es no es un defecto de los seguros de inversión. Es un problema generalizado en todo tipo de productos y estrategias de inversión, (seguros, fondos indexados, planes de pensiones, bonos, depósitos, etc) que se produce cuando quien invierte carece de Educación Financiera y quien asesora carece de profesionalidad y de escrúpulos.Tradicionalmente, en España, el inversor con escasos conocimientos opta por bajar a su banco a contratar sus productos de ahorro e inversión, y últimamente ni eso, porque los contrata online.El inversor inexperto y sin Educación Financiera, suele exigir un producto de inversión para el largo plazo, que garantice su dinero y sin costes de contratación y costes mínimos de gestión, y en un tiempo record sale de la entidad con lo que ha pedido sin haber recibido ningún asesoramiento.En el mejor de los casos, el inversor inexperto acude a un asesor financiero y exige lo mismo, riesgo prácticamente nulo y coste de contratación muy bajo, y el “presunto asesor” en vez de asesorar, le dedica un tiempo, le cobra muy poco por su “presunto asesoramiento” y recomienda uno de esos seguros, fondos indexados, planes de pensiones, bonos o depósitos cuya rentabilidad también será prácticamente nula, baja o muy poca.Estos productos no son dañinos a corto plazo, pero son tremendamente perjudiciales a largo plazo, porque las rentabilidades que garantizan nunca van a superar la inflación (encarecimiento anual de la vida), y el resultado final es una gran devaluación del capital invertido.La inflación media en España, históricamente supera el 3% anual (mas en los últimos 3 años).Si una inversión ofrece una rentabilidad inferior a la inflación (por ej. 1%), en un año se devalúa un 2%, pero en 20 años se habrá devaluado un 40%, sin tener en cuenta el interés compuesto.Esto no seria un timo o engaño, es fata de Educación y Planificación Financiera, reprochable al inversor autodidacta y falta de escrúpulos reprochable al asesor. Cualquier producto o estrategia de inversión a largo plazo, sea un seguro o no, debe cumplir los tres principios básicos de una correcta inversión;Diversificación global (cada euro invertido debe destinarse cientos o miles de activos, de diversos sectores y multitud de territorios internacionales)Promediación mensual. El producto o estrategia elegida debe permitir automatizar pequeñas aportaciones periódicas mensuales, para adquirir participaciones suba o baje el mercado bursátil, consiguiendo así el mejor coste promedio.Largo Plazo. Estas inversiones deben planificarse para objetivos a más de 10 años, pero permitiendo la disponibilidad de la inversión en cualquier momento, para atender a una necesidad, o si el inversor considere que ha cubierto su propósito en menor plazo.En conclusión, el sector asegurador como cualquier otro, es un sector muy especializado y para contratar sus productos se debe acudir a sus expertos.Hay cientos de seguros de inversión, que atiendan a diferentes propósitos, a corto, medio o largo plazo. No dudéis en consultar cualquier duda, antes o después de haber contratado alguno de ellos.