Hablando de las caídas, hace tiempo analicé por qué no había caído la vienda. No sólo son los tipos de interés lo que marcan subidas y caídas, sino todo sería super-sencillo de explicar. Sigue habiendo burbuja en inmuebles, que ahora mismo se mantiene de reservas-ahorros de las empresas y particulares. Los tipos de interés marcan mucho, pero no todo. Estamos ya observando una disminución brutal de poder adquisitivo. Esto hace que el consumo se resienta y el paro aumente. Pero estas cosas de las burbujas no pinchan como un globo, es más bien como un agua que se pone a fuego lento hasta que las burbujas hierven y se desoborda la olla. Veremos finalmente, de bajar, bajarán los inmuebles, de eso no hay duda. ¿Cuándo? No lo sé, no soy gurú, puede que el tiempo fuera 2021-2022 (como marca el nombre del tema), puede ser en 2025 o puede ser en 2032. Desde luego, luego las burbujas cuanto más durán más se dan la ostia hacia abajo. Pero hagamos un poco de historia, y esta no pinta bien.1) Se ponen tipos a 0 o negativos. La financiación se abarata y eso permite que empresas puedan hacer inversiones que favorecen el empleo y la calidad de vida. Por su parte, los bancos tras la crisis de 2008 son "regulados" y provoca que a nivel particular las compras se produzcan por parte de los que ya tienen "riqueza". Los jóvenes son expulsados del mercado. 2) Sube y sube, pero además la gente poseedora empieza a sostener su economía a través de los alquileres. Los casos son innumerables pero muchos de ellos irracionales: desde poseedores de 2 casas que pretenden que el alquiler de 1 les financie todo su estilo de vida, hasta las compras por inversión que pretenden que en el alquiler compense la hipoteca y además les de beneficio. 3) Se empieza a regularizar a través de los políticos. La oferta baja, hay caseros que ya no quieren alquilar. Se mete miedo en medios de comunicación con los okupas. Se crea un clima complicado que ahora mismo no me apetece analizar. 4) Suben tipos. La financiación ahora es cara y los poseedores de casa no quieren bajarse de la burra del sistema que han montado con el tema de los inmuebles. 5) Contexto actual: Las empresas, que son las que producen valor añadido a la sociedad, están dejando de invertir en nuevas cosas. Ya no se buscan nuevos empleos, mantienen los que hay. Junto con la inflacción todos podemos consumir menos. Ganamos más (se ha subido SMI, convenios, etc pero a nivel de poder adquisitivos nos estamos deteriorando). Personas que sus finanzas se tornan a pagar el alquiler como máximo gasto, tiendas que ganan menos que los propietarios del local-inmueble. Se va fraguando, se va fraguando... A partir de este punto se habla de bajar tipos, lo que podría seguir alargando la burbuja. Porque sí, esto explotará, pero se puede mantener mucho tiempo. Bancos centrales, propietarios de inmuebles y políticos tienen el poder y ahora mismo la gestión les va a llevar a una ostia de órdago con el camino que están tomando. La crisis que venga va a ser épica. Quizá la solución para evitar una crisis bíblica pase por 2 acciones:1) Construcción masiva de vivienda pública. Vivienda pública de verdad. Los programas actuales no son sociales, es una patraña. Piso "público" reciente en Madrid: 700-800 EUR de alquiler (más IBI, más comunidad, etc), piso privado en 2008 en Madrid: 400 EUR (más gastos de luz, agua, internet y lo que requiera el inquilino). ¿Entendemos que lo que se está haciendo es una estafa y no es vivienda pública real? Claro, que es que a los políticos tampoco les interesa un crack, dado que se llevan su parte en impuestos de los alquileres, de la compra-venta, etc. 2) Liberalizar. Se puede apoyar a caseros e inquilinos. Porque mucho se habla de los okupas y los okupas todo el día en la boca, pero estoy seguro que hay más caseros con abusos a sus inquilinos que okupas. Hay que defender el derecho del inquilino, como también las del casero. El hecho de que existan abusos de caseros hace que se mantengan en su línea de abusos, mientras que defender okupas o destrozos al final hace encarecer el precio final a quien quiere hacer las cosas bien.