Buenas tardes.
Si hay sucursales o alternativa web no debería haber problema, pero la moda del app-banking sin sucursales no es ninguna hipótesis. Suponiendo que el banco tuviera al menos un teléfono, aunque no tuviera sucursales ni web, si sólo se trata de traspasar un dinero, quizá pueda resolverse con cierta facilidad, con suerte, pero si la persona tiene valores, etfs, bonos, depósitos no cancelables o cualquiera otra "atadura", la cosa se complica.
En primer lugar, tendrías que deshacerte de los activos a un precio que quizá no te convenga o traspasarlos, lo cual genera problemas en muchas ocasiones y, supongo, costes. Si el depósito es no cancelable no creo que lo cancelen por ese motivo. Que yo sepa las órdenes de venta de valores por teléfono las cobran. Hacer todo eso por teléfono no será imposible, si lo combinamos con el correo electrónico, pero es muy molesto con un sistema que está pensado para funcionar de forma intuitiva y visual, en una app.
Añade que si los SAC ya resultan a menudo desesperantes para resolver problemas menores, no te cuento lo que puede ser para cerrar una cuenta con varios productos. Y olvidamos una cosa: la moda es ir quitando el teléfono, o tiempos de (des)espera eternos.
Nunca he cerrado una cuenta con la "ayuda" de una IA o AI, o como quieras. Eso sin contar con que la entidad puede estar en el extranjero, algo cada vez más normal. No se puede pedir a nadie que aguante esto. Una pregunta,
- ¿puede un banco que comienza ofreciendo sus servicios con web y app, eliminar la web?
Ante semejante panorama más vale comprarse otro móvil, pero la app-banking supone una discriminación para las personas que por motivos físicos no pueden usar sin problemas el móvil y que por motivos económicos no pueden cambiar de móvil porque a su banco le de la gana, o tener varios por si acaso la app de otra entidad u organismo no se lleva bien con el dispositivo nuevo. No se puede tolerar y no es nada ecológico. Me informaré.
Perdona el sermón. Saludos.
