Tienes razón, me gusta comprar muy barato en subastas. 1.- En el mes de noviembre ofrecí por una vivienda en Andalucía +- el 3% del valor dado por perito judicial, que cubría de sobra la reclamación, al igual que otras cientos de veces. En el mismo día hice escrito al juzgado para presentarme, ampliando datos de mi persona, acompañando el certificado de mejor puja, etc y además, igual que otras veces, pidiendo la devolución de la diferencia entre lo retenido y lo ofrecido, ya que aunque quiera no puedo quebrar la subasta y la diferencia me la tienen que devolver si o sí. En las presenciales me pasó varias veces y las competentes (casi siempre secretarias) me decían que cuando se aprobara el remate;; ¿por qué?, sólo puedo perder lo ofrecido, pues no les entraba en la cabeza. Sin embargo en las electrónicas la cosa ha cambiado y siempre acceden a devolver dicha diferencia. El juzgado, muy atento, me contestó al día siguiente diciendo que aún no tenían noticias y que cuando la tuvieran se resolvería......pero yo lo dejo caer, por si acaso. También me decían que aún no se podía aprobar remate, ya que había que comunicar al deudor por si quería presentar a un tercero......pero yo lo dejo caer, por si acaso. Pues me he adjudicado muuuuuchas subastas en esta forma, por qué además de cumplir con los requisitos mínimos legales, hay que tener muy en cuenta: quién es el deudor (no es lo mismo fallecido que vivo), empresa que persona física, empresa en activo o inactiva, etc, quién es el acreedor (no es lo mismo el Estado, entidad bancaria, etc que un particular), el tipo de demanda, no son lo mismo los ETJ/ETNJ que EH. El año del expediente, no es lo mismo un expediente de 2.020 que otro que se inició en año 2.008. Te diré que en esta ocasión el deudor pasará del asunto, el acreedor también, a éste último no le interesa cumplir con los requisitos que impone la ley y a mí me encanta ésta diferencia. Hace unos días me devolvieron la diferencia entre lo ofrecido y lo retenido. Ahora no me importa el tiempo que tarden, incluso que el deudor me presente a un tercero, conozco el negocio y me gusta que sea así, lo que no me gusta son las demoras injustificadas, ya que una vez me aprueban el decreto de remate, remato, la finca es difícil de perder, pero si encima me aprueban el decreto de adjudicación, ya tengo la finca al 99,99 %. 2.- Sumando todo lo dicho, o parte de lo expuesto, tengo una adjudicación del mes de octubre con decreto de adjudicación aprobado y que es una inversión de multiplicar, ya tengo las fincas apalabradas a la espera de inscribir. 3.- Si el comprar en subastas superando los tantos por ciento legales agilizara en forma apreciable los tiempos, ten por seguro que compraría a los tantos por ciento que gusta a los LAJ, pero eso no es así y merece la pena la tardanza. No me quejo del tiempo en que tardan en aprobar los decretos de remate al ofrecer tan exiguas cantidades, eso me viene hasta bien, me quejo que cuando ya han decidido que se apruebe decreto de remate (por qué no hay otra opción), remato y se aprueba decreto de adjudicación, se eternicen los tiempos para terminar el resto de trámites y eso te ocurrirá ofrezcas la cantidad que ofrezcas, así que grandes márgenes, ya que perder es más difícil. 4.- En Bilbao capital tengo comprada (ya comprado) una vivienda. Después de mucho tiempo y cumpliendo algunos de los requisitos expuestos, me aprobaron decreto de remate. Sabía que me lo iban a aprobar, pero siempre existe la duda. Rematé y el decreto de adjudicación se demoró +- 1 años. Les hice varios escritos y ellos................Por fin hará 2 meses me enviaron decreto de adjudicación, la preocupación era honda, ya que la vivienda la compré en 7.000 € y tengo previsto venderla en +-130.000 €, ya que el precio por la zona y la tasación pericial es de +-150.000 €. Por si alguien pregunta el por qué vendo más barato del precio de mercado, le diré que me gusta ser generoso y que el último euro se lo lleve otro, si puedo. 5.- Las subastas, al igual que otras actividades humanas, son fáciles, difíciles o imposibles, depende de los conocimientos que tengas de la materia, el tiempo que le dediques y, sobre todo, del capital del que dispongas. Ejemplo, para mí correr una maratón es imposible, pero hay personas a las que les gusta y las terminan y los que ganan siempre son los profesionales que se dedican a ello en cuerpo y alma, teniendo además aptitudes físicas y sicológicas y mucha preparación. Por último decir, que leo mucho en otros sectores de inversión: 3% de rentabilidad anual, 4% y algunos hasta se ponen contentos con unos dividendo del 8%, pues yo con esos márgenes prefiero volver a freír patatas o jubilarme. Gracias por leer el tostón y un abrazo.