La empresa de cosmética catalana Puig obtuvo un beneficio neto atribuido de 154 millones de euros en los seis primeros meses del año, cifra un 27% inferior a la del mismo periodo de 2023, según ha informado este viernes la compañía.
Puig ha atribuido el descenso de su beneficio neto a los costes de carácter excepcional derivados de su salida a Bolsa, así como a los gastos de adquisiciones y fusiones y otros ajustes, que han supuesto un importe de 84 millones de euros después de impuestos.
El ajuste principal ha sido el bonus extraordinario en efectivo de 94 millones de euros otorgado a todos los empleados de la compañía con motivo de su salto al parqué.
La firma alcanzó unas ventas netas de 2.171 millones de euros en el primer semestre del año, un 9,6% más que en el mismo periodo del año pasado, y obtuvo un resultado neto ajustado de 238 millones de euros, un 4,8% más, equivalentes al 11% de las ventas.
La compañía consiguió un resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado de 410 millones de euros, lo que supone un aumento del 7,4%, y un margen del Ebitda ajustado del 18,9%.
Además, Puig incrementó su cuota de mercado (VMS) global de fragancias selectivas un 11,3%, lo que supone una mejora de 60 puntos básicos respecto a junio de 2023.
PRIMER SEMESTRE "SÓLIDO"
Durante la presentación de los resultados a los accionistas, el consejero delegado de Puig, Marc Puig, ha valorado que se trata de un primer semestre "sólido" gracias a sus decisiones estratégicas.
"Me gustaría mencionar que nuestro negocio se gestiona de forma anual y este resultado está en línea con nuestras expectativas para el período, ya que experimentamos cierta estacionalidad", ha dicho.
Son los primeros resultados de Puig como compañía cotizada, tras haberse estrenado en Bolsa el pasado 3 de mayo a un precio de 24,5 euros por acción, y dentro del Ibex35