Las socimis están pasando un duro trance en los mercados. Merlin se hunde un 2,91% en la sesión mientras que Colonial hace lo propio un 2,84%. Estas caídas casi gemelas se producen el día después del pacto PSOE/Sumar cargado de medidas como la permanencia del impuesto a la banca. Sin embargo, algo que está golpeando con claridad el sector es la decisión de cambiar el estatuto legal de las socimis, que actualmente están exentas, en determinados tramos, del pago del impuesto de sociedades. El régimen especial quedaría, de este modo suprimido. En el propio acuerdo cargan las tintas contra la situación de estas empresas alegando que la decisión se debe a que "solo tributan al 1% y, a pesar del beneficio fiscal, no ha servido para mejorar la oferta de vivienda". Esto ha llevado a Bankinter a recortar sus valoraciones del sector. "Malas noticias para el sector que ahora pasaría a tributar un 25%, lo que reduciría en la misma proporción su generación de caja y capacidad para pagar dividendos".El economista.es
La victoria de Trump sigue generando euforia y optimismo sobre la renta variable. A pesar de que hasta las elecciones había ciertas dudas, el ascenso del republicano ha dado más gasolina a los principales índices con el S&P 500 conquistando los 6.000. Ahora muchos analistas están lanzando las campanas al vuelo y cambiando sus previsiones ante la nueva realidad de uno mercados cargados de recortes de impuestos, aranceles.El último en sumarse a esta ola ha sido Yardeni de Yardeni Research. El veterano inversor a comentado que ahora espera que el S&P 500 se asiente en los 6.100 puntos para este 2024 pero que los ascensos sigan el año que viene. De hecho, el experto comenta que cree que en 2025 se tomarán los 7.000 puntos y 8.000 para el año siguiente. "El espíritu animal que ha liberado la política económica de Trump llevará al S&P a los 10.000 a finales de la década".El economista.es
El nuevo dumping de China que podría hundir la inflación en Europa: una avalancha de mercancía a precio de derriboLa llegada de Donald Trump a la Casa Blanca ha hecho saltar las alarmas en todas las empresas exportadoras que tienen a EEUU como cliente. El impacto de un arancel del 60% (el que Trump ha prometido para China) puede ser devastador para estas firmas que venden sus bienes a la mayor economía del mundo. Buena parte de los focos se han puesto en China, cuya economía depende (aunque cada vez menos) sobremanera de las exportaciones a EEUU. Sin embargo, hay una región en la que las empresas pueden sufrir un golpe doble: los aranceles de EEUU y una 'avalancha' de bienes a precio de derribo desde China. Esta región no es otra que Europa.La zona euro podría sufrir de lleno los aranceles de EEUU, lo que provocaría importantes estragos en un continente que es puramente exportador (sobre todo desde que Alemania implantó su modelo de crecimiento tras la crisis de 2008) y que tiene en EEUU a su mejor cliente. Pero además, la zona euro podría tener que lidiar con los efectos indirectos que del gigantesco arancel del 60% que EEUU podría imponer a China. Si este escenario termina cumpliéndose, las empresas chinas buscarán otra región en la que depositar toda su mercancía (al menos hasta que su capacidad productiva se adapte a la nueva normalidad). La única región en el mundo similar a la de EEUU (en términos de tamaño y poder adquisitivo) es la eurozona.Esto ha llevado a que una serie de expertos haya especulado con la posibilidad de que China esté ya preparando un plan para desviar parte de los bienes que hoy van a EEUU y llevarlos a la zona euro. Para que la estrategia surta efecto, China sabe lo que tiene que hacer: reducir márgenes y vender estos productos a precio de derribo. El impacto sobre la economía de la zona euro es un tanto incierto. Por un lado, permitirá a los europeos acceder a bienes a precios baratos, pero por otro también puede expulsar a los bienes 'made in Europe' que se venden dentro del continente. Más poder adquisitivo para el consumidor y problemas para algunas empresas. La historia de la globalización podría repetirse de forma rápida y contundente en un corto periodo de tiempo y concentrada en Europa.El economista.es
A mi también me lo parece pero y si se produce.La bolsa ha cambiado,todo se cotiza como bueno para el mercado,nada le afecta.Ya no me extrañaría el año que viene ver los 7000,total es un 16% más.
Si con todo lo que ha pasado de guerras,inflaccion,tipos altos…..la bolsa no para de subir y la tendencia es la tendencia,para q baje tendrán que salir noticias desastrosas o un cisne negro.