El propósito exacto de nuestra vida es ser felices a nuestra manera, y no como nos impone el relato hiperconsumista, y te aseguro que lo somos. También te aseguro que no seríamos más felices gastando mucho más porque ya hemos probado a hacer todas esas cosas que hace la gente que tiene dinero, y no nos satisfacen. Tienes que entender que las personas son diversas. Veo una mayoría de gente a mi alrededor que está atrapada en la carrera de la rata, en trabajos que no les satisfacen y de los cuales no podrán salir hasta dentro de muchos años porque necesitan cubrir un montón de gastos absurdos que han convertido en necesidades. En el momento que quiera, puedo dejar de trabajar y dedicarme a pasear por el campo y disfrutar de la vida. También puedo coger una excedencia de varios años, o una jornada reducida, hace años cambié a un trabajo mucho menos estresante con un salario inferior y estoy contento de haberlo hecho. Ahora a las dos de la tarde cada día ya estoy en casa, y ya no tengo que trabajar por la tarde salvo una hora o así, con el ordenador, todos los días de la semana hago una siesta de hora y media. Cuando me retire, que será mucho antes de la edad ordinaria de jubilación, no tendré la incertidumbre de depender de una pensión del Estado, dependeré de una cartera variada de inversiones mucho más sólida que las pensiones del Estado español. ¿Es posible que detrás de tanta crítica haya una cierta envidia?